El lenguaje es la capacidad que tiene cada persona para comunicarse o expresarse ya sean pensamientos, sentimientos o ideas, puede ser de manera oral (símbolos, señas) o por escrito.
El lenguaje humano se caracteriza también en términos generales, se puede decir que la función del lenguaje es posibilitar la comunicación entre los sujetos, El lenguaje colabora, de esta manera, al aprendizaje socializado y la construcción de una cultura común.
Existen varios tipos de lenguajes como lenguaje verbal, lenguaje no verbal, lenguaje no verbal facial, lenguaje no verbal proxémico, etc.
El lenguaje hablado se basa en unidades universales de sonido llamadas fonemas que indican cambio en el significado. Los fonemas se combinan para formar morfemas, las unidades mínimas de significado en un idioma, como las palabras o partes de palabras, prefijos y sufijo.
Gramática: A su vez, las palabras pueden unirse en pensamientos todavía más complejos. Así como existen reglas para combinar fonemas y morfemas, también existen reglas para estructurar oraciones y su significado. Esas reglas son lo que los lingüistas llaman gramática. Los dos componentes principales de la gramática son la sintaxis y la semántica.
La sintaxis: Es el sistema de reglas que rigen la forma en que combinamos palabras para formar frases y oraciones significativas.
La semántica: describe cómo asignamos significado a los morfemas, palabras, frases y oraciones.
Una oración es una unidad gramatical formada por un sujeto y un predicado. El sujeto tiene siempre como núcleo un sustantivo y nunca puede comenzar por una preposición. El predicado tiene como núcleo un verbo , que puede ir conjugado en un tiempo simple, compuesto o ser una perífrasis verbal.
Imágenes: Una imagen es una representación mental no verbal. Las imágenes nos permiten pensar de maneras no verbales. No sólo visualizamos las cosas para poder pensar en ellas sino que también manipulamos esas imágenes mentales.
Conceptos: Un concepto es una categoría mental para clasificar a personas, cosas o eventos. Los conceptos nos proporcionan una manera de categorizar las experiencias de modo que al encontrarnos con algo nuevo no sea una sorpresa.
El pensamiento es la operación intelectual de carácter individual que se produce a partir de procesos de la razón. Los pensamientos son productos que elaboran la mente, voluntariamente a partir de una orden racional, o involuntariamente a través de un estímulo externo.
El pensamiento de las personas tiene una serie de características, es acumulativo y se desarrolla a lo largo del tiempo, ya que funciona a partir de estrategias de pensamientos que se van añadiendo entre ellas. Estas estrategias tienen forma de apuntar a resolver problemas. No solo sucede que el pensamiento se refleja en el lenguaje, sino que también va configurando al propio lenguaje. Es su modo de conservación, pero también es uno de sus ámbitos de transformación.
Hemos visto que el lenguaje está estrechamente ligado a la expresión y comprensión de los pensamientos. Puesto que nuestro idioma determina no sólo las palabras que usamos sino también la forma en que combinamos esas palabras en oraciones. De acuerdo con Benjamin Whorf, los patrones de pensamiento están determinados por el idioma que uno habla, un proceso llamado determinismo lingüístico. Algunos críticos de esta teoría sostienen que las personas de culturas con idiomas diferentes piensan de maneras similares en algunas cosas, incluso si su idioma no contiene palabras para esas cosas. Otros señalan que la gente crea palabras nuevas cuando las necesita.
Por lo general, transformamos los datos externos para que se ajusten a nuestro marco de referencia mental, pero en ocasiones necesitamos modificar nuestras estructuras mentales para acomodar los nuevos datos. Esto se hace más evidente en la solución de problemas.
La interpretación del problema: La representación del problema, es decir, su definición o interpretación, es el primer paso para resolverlo.
Producción de estrategias y evaluación del progreso Cuando sólo existe un número limitado de soluciones a un problema, el ensayo y error es la mejor forma de encontrar la solución correcta.
Obstáculos para la solución de problemas: Un factor que puede ayudar u obstaculizar la solución de problemas es la disposición mental, una tendencia a percibir y aproximarse a los problemas de ciertas maneras.
Toma de decisiones: A diferencia de otros tipos de solución de problemas, la toma de decisiones empieza con el conocimiento de todas las posibles soluciones u opciones.
Toma de decisiones lógica: Una aproximación lógica es seleccionar un conjunto de criterios, calificar cada una de las opciones en esos criterios y sumar las calificaciones para ver qué tan bien se ajusta cada opción a los criterios.
Heurística para la toma de decisiones Cuando carecemos de información completa o exacta acerca de una o más alternativas, podemos terminar juzgando una nueva situación en términos de su parecido con un modelo más familiar, el heurístico de representatividad.
Como Sacks sugiere, el lenguaje y el pensamiento están entrelazados. Nos resulta difícil imaginar a uno sin el otro y consideramos que ambos forman parte de lo que significa ser humano. Revisar el pasado, contemplar el futuro y pensar en las posibilidades que son elementos clave de la cognición humana, la cual, según todos los psicólogos, se refiere a los procesos mediante los cuales adquirimos y usamos la información. Ya hemos considerado varios procesos cognoscitivos, como la percepción, el aprendizaje y la memoria.